LUCHEMOS CONTRA LA POBREZA Y EL DOLOR HUMANOS
La pobreza extrema que golpea inmisericorde a muchas personas en el mundo,"se ríe,se ríe.."como el poeta dijo.Pero esa risa diábolica y cruel hará que retiñan los oidos de los hombres y los pueblos.!Ya Basta! es mucha la MISERIA,y mucho el dolor de los infelices condenados a vivir en la sombra,bajo los puentes, en sus llamadas casas,de politeleno, de cartón y de zinc..mientras,los ricos y poderosos,pagan hasta veine millones de dolares para realizar un viaje al espacio sideral y asi incrementar su egoismo desproporcionado.Tanta indolencia,apesta,tanta hipocresia repugna y,
el mundo de la opulencia,sigue en silencio complice junto a sus instituciones..
Mientras tanto nosotros, que decimos somos cristianos,nos ocupamos de preparar a un mundo de convertidos para la llegada al cielo,con el olor aún de su miseria...
Cristo es el Rey de la Paz y de la Justicia, del Amor y la Iguladad.La Iglesia siguiendo sus pasos,debe darse en entrega completa al cumplimiento de su misión liberadora,que se cumple en atención solidaria al hombre en sus necesidades,mentales,espirituales y físicas.Sí,viendo la ser humano como una unidad de alma cuerpo y espíritu,que necesita poder satisfacer las necesidades apremiantes de todo su ser y asi adcecuarse a la verdadera imagen de Dios, que se hizo hombre para dar Vida y ésta en Abuncia para todos por igual.
Salgámos pues, de las cuatro paredes,demónos en tesitura de servicio desinteresado al favor de los pobres de la tierra,que claman por un pedazo de pan que por derecho de creación les pertenece tanto como a los ricos y más favorecidos de la vida.
Para que nuestros cánticos de adoración sean oidos por el Dios de Toda la Tierra,que no hace acepción entre ricos o pobres,pongámos como meta insoslayable el alcanzar con las cuerdas del amor Eterno a los miserables y olvidados con un mensaje integral que atienda tanto al alma como al cuerpo,y que siembre una esperanza de mejoramiento humano para esta vida y la futura, que, bueno es que se diga bien alto;EL HOMBRE CON EL ESTOMAGO VACIO NO ES CAPAZ DE OIR MUY CLARFAMENTE EL MENSAJE DEL EVANGELIO.
Rev Leonides Penton Amador
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